sábado, 9 de agosto de 2008

Segundo día.


Miro la balanza y no sé que pensar, cierto, hace tiempo que ese objeto esta conmigo, lo compre a pie de carretera, fue un impulso, de ella me llamo la atención no el equilibrio que perdió hace tiempo si no más bien el óxido que la invade. Me paraliza pensar que el oxígeno se respire.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En tu ausencia me divierto. Como dulces, y reviento. Tomo helados, giro al viento. Si cierro los ojos, te siento.
Hace frio.